jueves, 24 de enero de 2008

Demanda a la ciudad de Wichita por arrestar a un pastor


Wichita, Kansas .- Una demanda ha sido implantada en contra de la ciudad de Wichita, Kansas, y de varios de sus policías por haber arrastrado a un pastor mientras se encontraba en la acera de un lugar público.


La demanda a favor de Mark Holick, pastor de Spirit One Christian Center, fue entablada por Alliance Defense Fund (ADF), una organización que apoya y defiende los derechos constitucionales, y que considera que el arresto del pastor Holick viola la primera enmienda, que “prohíbe que la legislatura haga ley alguna con respecto a la adopción de una religión o haga ley alguna que prohíbe la libertad de culto”.


El arresto de Holick sucedió el verano pasado durante un festival homosexual que se realizaba en un parque público en Wichita. El pastor llegó al lugar con el propósito de compartir su fe cristiana en el dominio público, pero luego tres minutos de haber llegado la policía lo arrestó.


Según los registros del caso, Holick había contactado a la policía una semana antes del evento para manifestarles su deseo de “comunicar el mensaje del Evangelio con las personas que asisten y hacen parte del acontecimiento”. Y aunque las autoridades le dijeron que no podía entrar en medio de la festividad, le afirmaron que la acera sería su “amiga”. Pero cuando el pastor Holick llegó a la acera junto con otros miembros de su iglesia, la policía los detuvo.
Luego los cargos por traspasar fueron levantados, pero según ADF eso no resuelve el problema. “Ejercitar los derecho de la Primera Enmienda no es un crimen”, dijo Joel Oster, asesor legal de ADF. “Detener a los cristianos simplemente porque ellos decidieron ejercitar esos derechos en un lugar público es algo inconstitucional”.


Según Oster las acciones de los policías fueron arbitrarias y caprichosas. “Las ciudades no deberían callar el discurso cristiano con detener al orador, y luego levantar los cargos al finalizar el evento”. Puesto que “tales acciones sólo sirven para amenazar a los futuros oradores y callar el mensaje cristiano”.

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